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17.1.11

Las ganas de amarte, y todo aquello que lo evita.

11.4.10

ese hoy ahora, es un ayer lejano.

Hoy pensába en mesas y escaleras. De subte particularmente, particularmente cuando hay varias a la periferia, y todas te sacan en lugares diferentes (pero simpre es casi lo mismo)
Como en los lugares de las mesas, la sinergia interplatal debería de ser equivalente, por lo menos equiparada con la sal y el zumo.
Esto lo pensé en una iglesia
Por que ya no son lo que eran.
Por que ya no soy lo que era.

Dioz seguirá siendo el mismo?

Tormentas

si nos sacan el rencor, la deuda del coche que no compramos, las ganas de poder comer el pastel de cumpleaños de la reina de Inglaterra, el miedo a las arañas, el ruido del colectivo, el tercer ojo, las medias sin pares, los aneurismas, el pavor al cáncer, los nudos de la espalda, los ecos eternos, las palabras que nos olvidamos, el nombre que le inventé a mi color favorito, la logosofía, y las ganas de mirar para arriba, podría llenar los inhóspitos cráteres de Mercurio con palabras aladas.

Laputamadre

Descubriendo nada.

(...) lo importante es tener siempre ganás de estirar el brazo, (mientras caminás por la vereda o similar) y tocar las hojas de los árboles.

Escuchar el ruido de la textura
el olor del color
el gusto de vivir

Es simplemente eso.

A.C.

Escuché un cuento, de una paloma y un cazador. Quién sabe por que fue escrito. escuché un cuento, no lo leí, maravilloso pecado. un amante virtual, inexistente, que acaricia a través de teclas y huele por los ojos. Extraño, común y ajeno. Patria lejana. tierra húmeda en verano. Pasto cortado, el olor en la memoria, la imagen detona un recuerdo, abre un cajón del fichero: A-2185578-KYT-36.12 > PASTO RECIÉN CORTADO

B-54545465-SDAS-356.1> olor a café en una mañana soleada.